Llegó fin de año, y como viene siendo la tradición de este día en el blog, os dejo por aquí algunas de las lecturas de divulgación científica que me han acompañado durante 2017. Han sido 23 en papel y 7 en mi nuevo Kindle Paperwhite, que ha venido a ser un pequeño alivio para mi vista cansada, especialmente por la noche.
El nacimiento imperfecto de las cosas (Guido Tonelli)
Un libro que nos propone un estimulante pero ligero recorrido por la física de partículas –a un nivel muy personal- y que se centra en cómo se llegó al descubrimiento del bosón de Higgs. Gustará a los aficionados e interesados en todo lo que rodea este campo apasionante de la física y lo que se mueve alrededor del CERN en Ginebra.
Albert Einstein, constructor de universos (Vicenzo Barone)
Breve pero intensa biografía de Albert Einstein centrada en una descripción del lado más sensible y humano del personaje, sin perder la relación con su obra científica. Interesante.
Tierra (Xurxo Mariño)
Una sensacional crónica a lo largo del mundo que nos recuerda a los míticos viajes de los naturalistas de la Ilustración. Pero Tierra es mucho más, porque combina con humor la crónica viajera cotidiana con el humor y la ciencia, sobre todo con la Geología. Absolutamente recomendable.
Una tribu propia (Steve Silverman)
Este libro me impactó. Ofrece una perspectiva distinta, al menos para mí, del autismo y su historia. En la contraportada dice que deberíamos leerlo todos, tanto si tienes cerca un caso de autismo o Asperger como si no. No puedo estar más de acuerdo. El prólogo es de Oliver Sacks, por cierto.
Los nativos digitales no existen (VVAA)
Como padre no puedo más que agradecer este libro a sus perpetradores principales, Wicho y Susana Lluna, por darme herramientas y argumentos contundentes sobre ciertas discusiones tecnológicas en casa. Más que recomendable.
El gran cuadro (Sean Carroll)
No me apasionan en exceso las incursiones de los físicos en la filosofía, con excepciones. Y esta no es una de ellas. El libro está muy bien escrito y todo el tema del naturalismo poético queda muy bien, pero… hay algo que no me convence. Merece una lectura pese a todo porque te deja con más preguntas que respuestas. Y eso es bueno.
Nikola Tesla, inventor (David J. Kent)
Suelo devorar todo lo que se escribe sobre Tesla y en esta ocasión no es que nos encontremos con algo nuevo bajo el sol para destacar especialmente, pero el libro cumple perfectamente como introducción a la vida y obra de Tesla y el diseño es muy chulo, con unas fotos espectaculares.
El olfato (José Ramón Alonso y Laura López Mascaraque)
Que no os engañe el tamaño de este libro, su lectura ofrece profundidad a la par que sencillez. Contiene curiosidades y ciencia de la buena en relación con este sentido tan potente y desconocido. Muy recomendable.
El cometa Halley (Isaac Asimov)
Creo que revisitar a los clásicos de la divulgación debería ser un ejercicio, al menos mensual, para cualquier aficionado al género. Tenemos mucho que aprender del estilo del gran Asimov, con esa facilidad de explicar los conceptos científicos y su ironía mordaz. Maravilloso.
Mars. The Pristine Beauty of the Red Planet (VV.AA)
Más que de divulgación este libro es un libro de arte. Recoge imágenes de la superficie de Marte realizadas en alta resolución por HiRISE. Se echa en falta que no haya una escala para situarse o un contexto geográfico de la superficie de Marte para que sea más intuitivo todo. Es quizá la única pega que le puedo ver, que no es poca.
Transgénicos sin miedo (JM Mulet)
Nueva genialidad de JM Mulet. Un libro divertido, riguroso y siempre necesario. Podemos creer que hemos leído mucho (o lo suficiente) para tener una opinión formada sobre los transgénicos, pero este libro profundiza desde tantos frentes, que lo considero imprescindible. Y no solo por la temática concreta -que también- sino por la visión de conjunto que ofrece sobre cómo funciona la ciencia y la tecnología de los productos de consumo.
La izquierda Feng Shui (Mauricio-José Schwarz)
Muy recomendable. Qué más puedo decir. El fino repaso que da Mauricio a las pseudociencias del buenrrollito es épico, con argumentos, explicaciones históricas, hechos y una pluma magnífica.
Convergencias (Peter Watson)
Con algún altibajo que otro, la sensación final al terminarlo es la de el autor pretenda que obtengamos una minirevelación sobre cómo se ha generado la ciencia de los últimos 150 años. Pero es una sensación que dura poco. El planteamiento inicial del libro es muy prometedor pero se va desinflando conforme avanza y da la sensación de que nos quiere meter alguna que otra cosa con calzador.
El libro de la química (Derek B. Lowe)
Un recorrido cronológico por la historia de la Química en 250 pasos. Desde la alquimia y los cristales hasta la Química del futuro. Un tocho interesante como consulta o para leerlo de un tirón.
Aprender Astronomía con 100 ejercicios prácticos (Jordi Lopesino)
Un libro muy ameno y didáctico para novatos e iniciados. El formato de ir avanzando ejercicio a ejercicio es todo un acierto. Trata muchos temas, desde elegir telescopio a cómo fotografiar una galaxia.
Bacterias, bichos y otros amigos (David G. Jara)
Un libro bien escrito sobre el mundo de los microbios y la ciencia que los rodea, donde quizá la única pega que podríamos ponerle es el abuso de las anécdotas personales del autor.
La invención de la naturaleza (Andrea Wulf)
Mastodóntico libro sobre la vida y obra de una de las figuras más importantes de la ciencia, Alexander von Humboldt. ¿Cómo es posible que hiciera tantas cosas ese hombre? Muy bien escrito y apasionante, en ocasiones parece que estemos leyendo una novela de aventuras.
Contra la simpleza. Ciencia y pseudociencia (Daniel Altschuler)
Un manual muy completo para distinguir la ciencia de la anticiencia y adquirir argumentos para situar cada cosa en su sitio. Toca todos los temas clásicos de los libros de escepticismo y pensamiento crítico: falacias lógicas, sesgos cognitivos, mal uso de las datos, etc. Me ha gustado especialmente uno de los apéndices finales, a modo de kit para detectar artificios pseudocientíficos. Es un libro denso, aviso.
Esto no estaba en mi libro de Historia Natural (Sergio Parra)
Una brillante colección de historias de criaturas del mundo animal y vegetal absolutamente sorprendentes, que nada tienen que envidiar a las imaginadas por la ciencia ficción o el terror. El estilo de divulgación de Sergio Parra, en su línea tradicional, muy ameno y muy bien escrito. Recomendable para todo el mundo.
Mi dieta cojea: Los mitos sobre nutrición que te han hecho creer (Aitor Sánchez García)
Muy bueno, se lee de un tirón. Y viene con el aval de uno de los mejores comunicadores de la nutrición y dietética del país. Para leer y regalar a los cuñaos.
Hijos de un tiempo perdido (JM Bermúdez de Castro, María Martinón, Belén Márquez, Ana Mateos y Susana Sarmiento)
Una delicatessen de la divulgación en todos los sentidos, tanto por el riguroso y profundo contenido de su texto como por la edición física del libro, con unas ilustraciones evocadoras y preciosas. Un viaje por nuestros orígenes que nos traslada hasta hace seis millones de años y que culmina con la llegada del Homo sapiens. Ciencia paleoantropológica de la buena. Un libro que no debería faltar en la lista de cualquier aficionado a la buena divulgación científica.
Las matemáticas vigilan tu salud (Clara Grima y Enrique Borja)
Más matemáticas, a un nivel algo más avanzado que los libros de divulgación matemática que pueblan las estanterías de las librerías, pero muy bien explicadas y centradas en la utilidad social y en los modelos relacionados con epidemias o vacunas. Es, como he dicho, un libro que exige un poco más que otros del estilo pero deja un buen sabor de boca cuando se termina.
El viaje más improbable (Walter Álvarez)
Llegué a este libro con la intención de disfrutar de la Geología, porque eso es lo que me habían dicho de él, pero lo cierto es que me defraudó un poco. No es un libro muy extenso, y la pretensión de abarcar catorce mil millones de años, hace complicada una divulgación en profundidad. Además Walter Álvarez parece más preocupado en contarnos la (su) idea de la «Gran Historia», que no digo que no sea interesante, pero de nueva tiene poco. En fin, sé que hay grandes admiradores de este libro por aquí y seguro que me cae alguna colleja por lo que he dicho. Me callo, porque he de reconocer que hay partes del libro brillantes en los primeros capítulos.
Los riesgos de la Nanotecnología (Pedro Serena)
Un libro muy interesante sobre los riesgos asociados a esta nueva tecnología que poco a poco se está introduciendo en procesos y productos industriales. Se sabe poco del tema, pero el autor da unas buenas referencias para profundizar.
Como Einstein por su casa (Javier Fernández Panadero)
Panadero lo ha vuelto a hacer. Nos ha engañado de nuevo a todos y con su aparente sencillez en el arte de la popularización de la ciencia, nos deja un colección de sucesos cotidianos de los que Javier extrae la ciencia que hay en ellos y nos la enseña. Y nos enseña a mirar con los ojos más abiertos lo que tenemos alrededor.
Estrategias de divulgación científica (Mulet, Seguí y Poza)
Más próximo a un libro de texto que a uno de divulgación, en esta obra escrita a seis manos, nos encontraremos con interesantes reflexiones y consejos sobre la divulgación científica.
Un número perfecto (Santi García Cremades)
Divulgar sobre las matemáticas es muy difícil, solo los más grandes pueden hacerlo. Y en este libro, Santi, que es muy grande, lo hace de forma magistral. Uno de los libros con los que más he disfrutado este año. 28 lecciones de matemáticas repletas de buen humor, buenas explicaciones, y geniales ilustraciones. El estilo de Santi me ha recordado al mejor Martin Gardner, cuando me dejaba con la cabeza dando vueltas cual niña de El exorcista, y lo digo totalmente en serio. Y encima es su primer libro. No habrá que perderlo de vista, y por supuesto, no os perdáis Un número perfecto. Muy bueno.
Nanomedicina (Daniel Closa)
No es un libro muy extenso y profundo, pero como introducción a la nanociencia, y en particular a la nanomedicina y su prometedor futuro, cumple a la perfección.
Home Lab (Robert Winston)
Un genial libro de experimentos, muy divertido y completo, enfocado en principio para los más pequeños de la casa, pero que ofrece ideas bastante interesantes para los más mayores. Merece la pena que le echéis un vistazo. A destacar, las explicaciones de cada experimento.
Fantasmas del cerebro y otras historias de la ciencia y de la mente (José Ramón Alonso Peña)
Más tradicional si cabe que este recopilatorio anual de lecturas es que siempre aparezca alguna obra sobre neurociencia de JR Alonso en esta lista. En Fantasmas del cerebro, su último libro, nos vuelve a regalar esas historias de la neurociencia que solo él sabe contar, atrapándonos en ellas, dejándonos embriagados y fascinados por todo lo que nos cuenta. Si has leído sus otros libros, saber de qué estoy hablando, y si no lo has hecho, no te lo pierdas.
Otros libros que he leído y me han gustado son: El universo de cristal (Dava Sobel), que narra de forma novelada una parte de la historia de la astronomía que merece más difusión por lo que implica, Las chicas son guerreras (Irene Cívico y Sergio Parra), una entretenida lectura que recomiendo al público más juvenil, Historia Absurda de España (Ad Absurdum), del que hice una reseña en El Buscalibros, y Mitos nórdicos (Neil Gaiman), que recomiendo a todo el mundo aficionado a la mitología de cualquier cultura, no solo la escandinava.
También ha habido tiempo para la ciencia ficción. Por fin leí El problema de los tres cuerpos, de Liu Cixin, y me encantó. Saboreé, por recomendación de los amigos de Radio SkyLab, El hombre en el laberinto, un libro de Robert Silverberg poco conocido que me alucinó (¡Cómo es posible que no lo conociera!). Con 33, de Daniel Hinojosa, disfruté y lo devoré en una sentada. Y por si fuera poco, he releído Cita con Rama y 2001 de Arthur C. Clarke, Los desposeídos, de Ursula K. Le Guin, y El día de los Trífidos, de John Wyndham. Creo que el año que viene voy a volver a visitar con más frecuencia a los clásicos de la ciencia ficción, por nostalgia, por qué no.
Y en vísperas del doscientos aniversario de la publicación de Frankenstein, de Mary Shelley, no puedo irme sin dejaros dos pequeñas joyitas relacionadas con él. La primera es el libro Frankenstein insólito, que recopila relatos cortos de escritores como Brian Aldiss, Philip J. Farmer, Kurt Vonnegut, y otros tantos. Y la segunda es Frankenstein. Edición anotada para científicos, creadores y curiosos en general. Este último libro es una gozada para los que siempre hemos reivindicado esta novela como algo más que la precursora de la ciencia ficción.
Y hasta aquí hemos llegado. Os deseo un nuevo año repleto de lecturas, éxitos, salud y buena divulgación.
¡Besos y abrazos!
domingo, 31 de diciembre de 2017
sábado, 23 de diciembre de 2017
Mitología y ciencia #32 en Onda Regional de Murcia
El dios griego Éter es el protagonista de esta nueva entrega radiofónica en Onda Regional. Un dios algo desconocido pero que ha tenido bastante influencia en la ciencia, incluso en la informática.
Para descubrirlo puedes escuchar el programa (04/12/2017) aquí.
NOTA: Esta entrada es mi segunda participación en la LXV edición terbio del Carnaval de Química, alojada en el blog @quimidicesnews
miércoles, 20 de diciembre de 2017
La quimiofobia nuestra de cada día [Conferencia]
Os dejo la conferencia que impartí en la Universidad de Alicante dentro del curso Internacional La ciencia toma la palabra, que se celebró hace unos meses y en el que compartí cartel con grandes divulgadores y científicos como María Blasco, Fernando Frías, José Pío Beltrán, Alberto Nájera... Espero que os guste. ;)
NOTA: Esta entrada participa en la LXV edición terbio del Carnaval de Química, alojada en el blog @quimidicesnews, que recomiendo encarecidamente por su rigor y frescura. Gracias por resucitar el Carnaval :)
NOTA: Esta entrada participa en la LXV edición terbio del Carnaval de Química, alojada en el blog @quimidicesnews, que recomiendo encarecidamente por su rigor y frescura. Gracias por resucitar el Carnaval :)
sábado, 9 de diciembre de 2017
Nos vemos en #Desgrana4
La próxima semana se celebra en el Parque de las Ciencias de Granada la cuarta edición del evento Desgranado Ciencia. Toda una buena noticia para la salud de la divulgación científica nacional. El programa de este año es espectacular, incluye un curso de técnicas de divulgación, dos días de charlas y encuentros, concurso de pósters de investigación, actividades para niños, libros y mucho más.
Tenéis el programa con toda la información en la web de la organización. Y por mi parte solo me queda animaros a que os acerquéis a Granada el próximo fin de semana porque la ocasión lo merece y además el ambientazo de estos eventos recarga las pilas. Yo estaré por allí el viernes por la tarde y el sábado, así que si no nos conocemos, será un placer saludarte. :)
¡Nos vemos en Granada!
domingo, 3 de diciembre de 2017
Mitología y ciencia #31 en Onda Regional de Murcia
Llegó el turno para el dios nórdico Thor y su influencia en la nomenclatura científica. Resulta curioso que no exista un asteroide con su nombre. Ahí dejo la idea... ;)
Podéis escuchar el audio (20/11/2017) desde este enlace.
Mitología y ciencia #30 en Onda Regional de Murcia
Tique (o Tyche en latín) era la diosa griega de la fortuna y el destino que solía aparecer representada en los muros de muchas ciudades de la Grecia antigua. Es el equivalente a la diosa Fortuna de la mitología romana.
En este nuevo episodio de la serie sobre mitología y ciencia de Onda Regional de Murcia aprenderemos un poco más de su influencia en la ciencia.
Para escucharlo (06/11/2017) pulsa aquí.
miércoles, 22 de noviembre de 2017
CIeNZA. Diálogos con la ciencia [Ciclo en la Biblioteca Regional de Murcia]
Buenas noticias. Durante el curso 2017-18 estaré coordinando el ciclo CIeNZA. Diálogos con la ciencia, una iniciativa de la Unidad de Actividades Culturales de la Biblioteca Regional de Murcia (BRMU), que ha tenido la temeridad de pensar en un servidor para comenzar este nuevo proyecto.
¿Qué significa CIeNZA y en qué consiste el ciclo?
CIeNZA es un juego de palabras que une la palabra «ciencia» con «enza», esta última es un término que en Murcia significa: inclinación, enamoramiento, afición manifiesta (Vocabulario murciano, Alberto Sevilla, 1919).
Esa combinación entre la ciencia y el enamoramiento o la afición manifiesta, se materializará en encuentros con los escritores de divulgación científica más relevantes del panorama nacional.
La periodicidad será mensual e iremos anunciando por aquí al autor con tiempo. La primera cita será este viernes 24 a las 19:30 en el Salón de Actos de la Biblioteca Regional. Y el invitado de excepción será el gran Jose López Nicolás (aka @ScientiaJMLN), nuestro murciano más universal en el mundo de la divulgación. Hablaremos de su obra, de su trayectoria y del presente y futuro de la divulgación científica.
Os espero a todos, y os aseguro que será un encuentro de lo más interesante y enriquecedor. Y desde aquí, muchas gracias a nuestra querida Biblioteca Regional Murcia por hacer posible un ciclo como este. Ya lo dijo Carl Sagan, «Cada esfuerzo por clarificar lo que es ciencia y de generar entusiasmo popular sobre ella es un beneficio para nuestra civilización global».
¡Viva la CIenZA!
Más Información en la web de la BRMU (Agenda cultural).
Más Información en la web de la BRMU (Agenda cultural).
martes, 7 de noviembre de 2017
El espectador con rayos X en los ojos [Conferencia en el Fanta Elx]
Los próximos días 16,17 y 18 de noviembre tendrá lugar en el Centro de Congresos de la ciudad de Elche el Festival de Cine Fantástico FANTA ELX, un magnífico evento para los amantes del género que se consolida en el panorama de festivales de cine con su quinta edición consecutiva.
En esta ocasión la organización ha destinado la tarde del viernes 17 a la relación entre la ciencia y el cine. Todo un detalle que hemos de apoyar porque cualquier esfuerzo para llevar la ciencia a la sociedad lo merece. En la sección titulada 'Frankenstein', el escritor Gregorio Sánchez presentará tres conferencias que versarán sobre el mundo de la ciencia dentro del género de cine fantástico. Será el viernes de 16:30 a 21:00. Y sí, soy uno de los tres ponentes escogidos, junto con mis admirados Nahúm Méndez Chazarra y Fco. Javier Martínez Guardiola.
Mi intervención se titula El espectador con rayos X en los ojos, un pequeño homenaje a una película de serie B de los años sesenta dirigida por Roger Corman. Los más viejunos del lugar seguro que la recuerdan. ;)
Mil gracias a FANTA ELX por la invitación y espero veros allí a los que podáis asistir. Intentaré que sea lo más interesante posible. :)
Toda la información del festival está en su web:
www.festivalcinefantaelx.com
Actualización (12/11/2017): vídeo promocional
viernes, 3 de noviembre de 2017
Mitología y ciencia #29 en Onda Regional de Murcia
Calisto y Júpiter, de François Boucher |
Turno para la bella Calisto en la radio, cuya trágica historia ascendió a los cielos.
Si os apetece, podéis escucharlo aquí (23/10/2017).
Mitología y ciencia #28 en Onda Regional de Murcia
Ixión, por José de Ribera |
El día 9 de octubre estuve en MuryCía, el magazine matinal de Onda Regional, hablando del personaje mitológico Ixión y su influencia en la ciencia.
Podéis escucharlo aquí.
Mitología y ciencia #27 en Onda Regional de Murcia
Espero que os guste.
Programa del 02/10/2017: Para escucharlo pulsa aquí.
domingo, 8 de octubre de 2017
Los discípulos murcianos de Santiago Ramón y Cajal
La figura de Santiago Ramón y Cajal (1852-1934) es de sobra conocida por los lectores de este blog, o eso espero. Sin duda, se trata del mejor y más reconocido investigador español de todos los tiempos, galardonado con el Premio Nobel de Medicina en 1906, fue muchas cosas en su vida: joven rebelde, inventor, médico militar, culturista, fotógrafo, dibujante, ajedrecista, explorador, escéptico... Escribió o participó directamente en más de doscientos libros, artículos y manuales científicos, destacando entre todos ellos su Histología del sistema nervioso del hombre y de los vertebrados, un clásico de la neurociencia.
Cajal es uno de los científicos más citados de la Historia de la Ciencia, a la altura de gigantes como Einstein, Darwin o Newton. Lo que poca gente sabe es que tuvo discípulos de Murcia. Y vaya discípulos. Hablemos un poco de ellos.
Luis Calandre Ibáñez (1890-1961)
Nace en Cartagena en una familia de siete hermanos, su padre era médico en el Hospital de la Caridad. En 1906 se traslada a Madrid para estudiar Medicina. Allí asiste a las famosas clases de Histología de Don Santiago Ramón y Cajal, cuya influencia le marcará durante su carrera investigadora y personal. Con Cajal, y con el también neurocientífico Nicolás Achúcarro, trabaja en la Junta de Ampliación de Estudios (JAE) como ayudante desde la mitad de su carrera hasta finalizar sus estudios.
Tras licenciarse en Medicina en 1911 inicia una estancia en Berlín continuando los estudios de histología del corazón que inició con Achúcarro y Cajal. Tras volver de Alemania funda la revista Archivos de Cardiología y Hematología, en donde aparece por primera vez en español el término «cardiología».
Comprometido con la II República, fue un destacado cargo de la Cruz Roja y tras la Guerra Civil fue condenado a 12 años y un día de prisión menor e inhabilitado como médico. Alejado de la investigación y la docencia se centró en autoeditar sus libros hasta su muerte en 1961.
Amigo de Juan Ramón Jiménez, Giner de los Ríos, Manuel Cossío y otras personalidades de su época, a Calandre se le considera como el introductor de las técnicas modernas de la cardiología en España.
Román Alberca (1903-1967)
Nace en Alcázar de San Juan pero permaneció vinculado a Murcia durante toda su vida. Comenzó sus estudios de Medicina en Madrid en 1917, siendo alumno de Ramón y Cajal pero especialmente de Pío del Río Hortega, con el que colaboró entre 1921 y 1926 en el Laboratorio de la Residencia de Estudiantes.
En 1928 consigue la plaza de director del Hospital Psiquiátrico de Murcia, una institución precaria y obsoleta que modernizó y dotó de nuevos medios. Su ideología de izquierda moderada le causó problemas después de la Guerra Civil, pero eligió permanecer en Murcia. En 1943 publica el libro Neuraxitis ectotropas, una obra a caballo entre la neurología y la histología. Obtuvo en 1950 la cátedra de Psiquiatría de la Universidad de Salamanca, que cambió por la de Valencia, y la simultaneó con su cargo en Murcia hasta su muerte en 1967.
Luis Valenciano Gayá (1905-1985)
Nació en la ciudad de Murcia donde comenzó sus estudios de ciencias con el que fuera rector, José Loustau, que le orientó y aconsejó para que continuara Medicina en Madrid. En Madrid fue alumno de Cajal, Juan Negrín y Marañón. Tras especializarse en Psiquiatría, y trabajar como médico en Madrid, se incorpora como Teniente médico durante la Guerra Civil del Ejército republicano. Al finalizar la guerra fue apartado de sus cargos y tuvo que retirarse a Murcia en un piso prestado para comenzar desde cero.
Poco a poco se fue reincorporando a la profesión médica, y pese a las zancadillas por su pasado político, ingresa en la Academia de Medicina y finalmente es nombrado director del Hospital Psiquiátrico de Murcia, en 1967, tras el fallecimiento de Román Alberca.
Después de su jubilación en 1976, y hasta su muerte en 1985, se dedicó a divulgar la historia científica de su generación. La Universidad de Murcia lo reconoció como doctor honoris causa en 1983.
Antonio Pedro Rodríguez Pérez (1912-1964)
Fue el más joven de los discípulos de Cajal. Este ciezano de nacimiento pasó su infancia y adolescencia en Cartagena, debido a la profesión de su padre, que era practicante de la Armada.
En 1929 comienza sus estudios de Medicina en Madrid donde conoce a Ramón y Cajal, que lo recomienda para que trabaje con su aventajado discípulo Jorge Francisco Tello, con el que publica varios artículos científicos.
Durante la Guerra Civil fue sucesivamente teniente, capitán y comandante del Ejército Republicano en el área de Sanidad. Fue Jefe de Hospitales del Ejército de Maniobra y del Levante.
Tras la guerra, se traslada desde Cartagena a Cieza para cumplir una condena de 32 años de prisión. En los años de encarcelamiento escribió libros como Patografía de Don Quijote y Sancho, organizó conferencias sobre Ramón y Cajal para los presos y actuó como médico ayudante en la prisión de Cartagena. Con su amigo Eduardo Ortiz de Landázuri, médico responsable de las prisiones españolas, realiza el que se considera primer trabajo de nutrición en la Región de Murcia. Un estudio sobre la desnutrición en los establecimientos penitenciarios, que se convirtió en tesis doctoral para Ortiz de Landázuri.
Antonio Rodríguez consigue la libertad provisional en 1944 y a partir de ese momento retoma su actividad docente e investigadora en España, pero sobre todo en Hispanoamérica, donde adquiere su merecido reconocimiento.
Falleció en Madrid en 1964 dejando una amplia obra científica sobre histología, cultivo de tejidos, neumología, endocrinología, medicina interna y otras disciplinas. Siempre fue un admirador de su maestro Santiago Ramón y Cajal, al que dedicó obras y conferencias.
FUENTES Y MÁS INFORMACIÓN:
- Diccionario biográfico y bibliográfico de la Ciencia y la Medicina en la Región de Murcia, José Miguel Sáez Gómez, Carlos López Fernández, Pedro Marset Campos y Juan Francisco López Sánchez. EDITUM, 2017.
- Sobre Ramón y Cajal, nada como el blog de José Ramón Alonso Peña y su categoría sobre Cajal.
viernes, 29 de septiembre de 2017
Locusta, la envenenadora al servicio de Agripina la Menor y Nerón
[Todas las curiosidades sobre tóxicos y venenos (serie Curio-Tox) que he publicado en el blog pueden leerse en este enlace]
Si algún lector habitual ha asistido durante estos últimos años a alguna de mis charlas divulgativas sobre los venenos a través de la Historia, reconocerá enseguida a nuestra protagonista de hoy: Locusta, la esclava envenenadora.
Para hablar sobre ella tendremos que remontarnos a la convulsa Antigua Roma del siglo I d.C. durante el mandato de los emperadores Calígula y Claudio. Tal fue su fama que se le atribuyen más de 400 asesinatos mediante el uso de arsénico y setas tóxicas. Locusta fue una esclava de la Galia que tras huir de un marido maltratador, al que asesinó no sabemos si con veneno o de otra forma, huyó a Roma para buscar fortuna aprovechando su extenso conocimiento de plantas y hongos, tanto con fines medicinales como con otros usos más oscuros.
No hay muchos datos de la actividad de Locusta al servicio de Calígula pero sí que parece estar más documentado que entró en la nómina de Agripina la Menor, tras ganarse su reputación en las laderas del monte Palatino a donde acudían hombres y mujeres para recibir ponzoñas bien calculadas, y cuyo talento llegó hasta lo más alto de la nobleza romana.
Si algún lector habitual ha asistido durante estos últimos años a alguna de mis charlas divulgativas sobre los venenos a través de la Historia, reconocerá enseguida a nuestra protagonista de hoy: Locusta, la esclava envenenadora.
Para hablar sobre ella tendremos que remontarnos a la convulsa Antigua Roma del siglo I d.C. durante el mandato de los emperadores Calígula y Claudio. Tal fue su fama que se le atribuyen más de 400 asesinatos mediante el uso de arsénico y setas tóxicas. Locusta fue una esclava de la Galia que tras huir de un marido maltratador, al que asesinó no sabemos si con veneno o de otra forma, huyó a Roma para buscar fortuna aprovechando su extenso conocimiento de plantas y hongos, tanto con fines medicinales como con otros usos más oscuros.
No hay muchos datos de la actividad de Locusta al servicio de Calígula pero sí que parece estar más documentado que entró en la nómina de Agripina la Menor, tras ganarse su reputación en las laderas del monte Palatino a donde acudían hombres y mujeres para recibir ponzoñas bien calculadas, y cuyo talento llegó hasta lo más alto de la nobleza romana.
Tras la ejecución de la emperatriz Mesalina por traición, el emperador Claudio contrajo matrimonio por cuarta vez con su sobrina Agripina, la hermana del fallecido Calígula y madre soltera de un tierno infante llamado Nerón. Claudio aportó al mantrimonio a su hijo Británico que, en principio, era el heredero al trono. Pero Agripina tenía otros planes y ahí es donde entró en acción Locusta.
En cuanto Claudio accedió a que Nerón fuera nombrado como sucesor en perjuicio de Británico, Agripina quiso adelantar la sucesión de su amado hijo y le preparó una sabrosa cena a base de setas -proporcionadas por Locusta- a su esposo, que murió entre fuertes dolores y convulsiones. Británico no duró mucho más y también fue envenenado poco antes de cumplir catorce años.
De esta manera, Nerón acabó siendo emperador (también intentó envenenar a su madre pero se cansó y la apuñaló) y el resto es la conocida secuencia que conocemos del cine... el incendio de Roma, los cristianos perseguidos y asesinados en el Coliseo... ¡NO!, el Coliseo se construyó después de esa época y Nerón nunca persiguió a los cristianos. O eso dicen los que saben.
El final de Locusta fue menos sutil que la muerte por envenenamiento. Fue condenada por el emperador Galba, sucesor de Nerón, a morir violada por una jirafa amaestrada para luego ser devorada por una manada de leones (Dammantio ad bestias). O eso se lee en algunos sitios (sí, en la Wikipedia). Pero no es así, no parece que fuera tan salvaje y morbosa la cosa. Las leyendas urbanas también existían en la antigua Roma. Y al final por ser mujer parece que el castigo tenía que ser ejemplarizante. Todo apunta a una simple ejecución por apuñalamiento o entrangulada.
Hasta aquí la historia y ahora un poco de ciencia.
El veneno favorito de Locusta era el proporcionado por la Amanita phalloides, un hongo del orden Agaricales bastante peligroso por contener amatotoxinas y falotoxinas, y que se considera responsable de la mayoría de muertes por intoxicación accidental tras su consumo.
Las toxinas de la Amanita phalloides bloquean la trascripción de las enzimas ARN polimerasa 1 y 2 en los organismos eucariontes, como nosotros, provocando necrosis en el hígado y los riñones.
Recordad, todas las setas son comestibles. Todas, sin excepción. La única pega es que hay algunas que solo se pueden comer una vez.
#Naukas17 y Premio Tesla de divulgación 2017
Así comencé #Naukas17:
Han pasado dos semanas y todavía estoy en las nubes.
Siempre he dicho que la divulgación científica nos convierte en mejores personas. Y eso es, fue y será Naukas. Miles de buenas personas en el escenario, en los patios de butacas o en sus casas. Todo suma y todos sumamos.
¡Viva la ciencia y su divulgación!
Todas las charlas de Naukas 2017, por cortesía de EITB
Haced clic aquí para ver mi charla en #Naukas17 |
Y así terminé:
Han pasado dos semanas y todavía estoy en las nubes.
Siempre he dicho que la divulgación científica nos convierte en mejores personas. Y eso es, fue y será Naukas. Miles de buenas personas en el escenario, en los patios de butacas o en sus casas. Todo suma y todos sumamos.
¡Viva la ciencia y su divulgación!
Todas las charlas de Naukas 2017, por cortesía de EITB
sábado, 23 de septiembre de 2017
Mitología y ciencia #26 en Onda Regional de Murcia
Mitología y ciencia #25 en Onda Regional de Murcia
El dios griego Pan, su historia y su relación con la ciencia no se limita solo a la etimología de la palabra «pánico». Puedes aprender más en el programa que le dedicamos el 11 de septiembre en Onda Regional de Murcia.
Se puede escuchar aquí.
Mitología y ciencia #24 en Onda Regional de Murcia
Turno del dios egipcio Amón en la sección de mitología y ciencia de Onda Regional de Murcia (programa emitido el 4 de septiembre de 2017). Se puede volver a escuchar aquí.
martes, 29 de agosto de 2017
Mitología y ciencia #23 en Onda Regional de Murcia
lunes, 28 de agosto de 2017
Otra pequeña batalla perdida en la lucha contra la quimiofobia
Hilo dirigido a la excelente @Fundeu sobre el uso de la palabra 'químico' y su controversia como sinónimo de 'sustancia química' 1/n— Daniel Torregrosa (@DaniEPAP) 23 de agosto de 2017
Hace unos años @Fundeu lo expresó en un artículo (que ahora no está disponible), pero tuvo eco en medios. P.e. https://t.co/kJ6YP04uCq 2/n— Daniel Torregrosa (@DaniEPAP) 23 de agosto de 2017
— Daniel Torregrosa (@DaniEPAP) 23 de agosto de 2017
Bonus: Esto es lo que decía @Fundeu y ahora no está disponible en su web. Lo he reportado hoy mismo y no sé si será un error... pic.twitter.com/sQQHAu9uYm— Daniel Torregrosa (@DaniEPAP) 23 de agosto de 2017
Hemos comprobado que «químico» está extendido desde hace tiempo, y al fin y al cabo no es realmente incorrecto en español.— Fundéu BBVA (@Fundeu) 23 de agosto de 2017
Sin comentarios.
miércoles, 16 de agosto de 2017
La influencia de la mitología en la ciencia (47ª Parte): Amón
[Nota inicial: Se puede consultar el resto de entregas de la serie sobre la influencia de la mitología en la ciencia desde este enlace]
En la mitología egipcia al dios egipcio Amón (Amén, Amún) se le aplicaba el epíteto de «rey de los dioses», hecho que hizo que los griegos lo asimilaran con Zeus. A Amón se le representaba con una cabeza de carnero con cuernos retorcidos. Era tenido como dios que mantenía la creación y de la fertilidad. Su esposa era Amonet o Amenet, una diosa protectora personificación del viento del norte, dador de vida.
NOTA FINAL: Esta entrada ha sido posible gracias a Óskar González (@Oskar_KimikArte), profesor de la UPV/EHU, y todo un maestro en amalgamar la Química y el Arte. Echad un vistazo a su blog KimikArte y a sus colaboraciones con el Cuaderno de Cultura Científica, que son una absoluta delicia. Muchas gracias por ponerme en la pista de Amón, Oskar. :-)
Representación típica de Amón
durante el Nuevo Reino | Fuente
En la mitología egipcia al dios egipcio Amón (Amén, Amún) se le aplicaba el epíteto de «rey de los dioses», hecho que hizo que los griegos lo asimilaran con Zeus. A Amón se le representaba con una cabeza de carnero con cuernos retorcidos. Era tenido como dios que mantenía la creación y de la fertilidad. Su esposa era Amonet o Amenet, una diosa protectora personificación del viento del norte, dador de vida.
Un gas, un fósil y una gema
El amoniaco recibe su nombre procedente del término griego ammōniakón, que significa «del oásis de Amón». Conocido desde la antigüedad, el historiador Herodoto lo menciona como presente en forma de efluvios (ahora sabemos que era cloruro de amonio) en unos depósitos de sal cerca del templo de Amón en la actual Libia donde se calentaba estiércol de camello. Parece ser que el nombre se lo puso el químico sueco Torbern Bergman (1735-1784), famoso por sus aportaciones en la notación de la Química.
Templo de Karnak, el gran santuario de Amón | Fuente |
El amoniaco (NH3) es un gas incoloro con un olor muy característico. Y su importancia en la última centuria ha sido objeto de ríos de tinta, desde la revolución de la agricultura como fertilizante hasta su uso como precursor de explosivos, industria textil y un largo etcétera.
Los amonites, moluscos cefalópodos que vivieron hace 400 millones de años en el periodo Devónico Medio se llaman así por Plinio el Viejo (23-79 d.C), que en su Historia Natural asoció estos fósiles al cuerno de Amón por su forma enrrollada, en latín Amonius cornu. De ahí derivó hacia la voz Ammonite.
Los amonites, moluscos cefalópodos que vivieron hace 400 millones de años en el periodo Devónico Medio se llaman así por Plinio el Viejo (23-79 d.C), que en su Historia Natural asoció estos fósiles al cuerno de Amón por su forma enrrollada, en latín Amonius cornu. De ahí derivó hacia la voz Ammonite.
Existe una preciada -y preciosa- gema de amonite, aunque no es la única, que le hubiera encantado particularmente a la diosa griega Iris por su deslumbrante carácter iridiscente. Fue descubierta cerca de Lethbridge, en Alberta (Canadá) y se expone en el Museo Americano de Historia Natural. ¿Quién dijo que los fósiles eran aburridos?
Fuente |
NOTA FINAL: Esta entrada ha sido posible gracias a Óskar González (@Oskar_KimikArte), profesor de la UPV/EHU, y todo un maestro en amalgamar la Química y el Arte. Echad un vistazo a su blog KimikArte y a sus colaboraciones con el Cuaderno de Cultura Científica, que son una absoluta delicia. Muchas gracias por ponerme en la pista de Amón, Oskar. :-)
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